La estancia de mis fechas
En las nubes peregrinas.
Níveas escarchas
Se aglomeran a pasitrote
En las sienes de mi alma,
Temporal irrefutable de borrascas
En el archivo de mis días.
Mis plegarias hirsutas
Rastrean el paraíso perdido de Adán
O la barca extraviada de Noé
En el ponto inexistente de la eternidad.
Las nubes de mis sueños
Silentes y apacibles
Danzan en la vigilia ausentes
De trasnochos de un alba adormecida.
Derechos reservados
No hay comentarios:
Publicar un comentario